Logo Aurys

Insights y Tendencias

Search

LOS PROYECTOS QUE BUSCAN IMPULSAR EL DESARROLLO DE LA ZONA NORTE HACIA EL 2030

Suplemento Minero, Diario Financiero

En la zona norte del país, gran parte de las regiones depende del desarrollo de la industria minera para apalancar su crecimiento e innovación. Actualmente, existe una serie de proyectos en el sector que se espera marquen el futuro de estos territorios.

Santo Domingo, la expansión de Collahuasi y Minera Centinela, la adecuación de la operación minera Spence, las obras complementarias y ajustes operacionales de la mina Chuquicamata Subterránea, y la actualización del proyecto de la división Radomiro Tomic de Codelco son algunas de las iniciativas que, a juicio de Patricia Gamboa, directora de estudios y políticas públicas de la Comisión Chilena del Cobre, ayudarán a apalancar el desarrollo de regiones como Antofagasta y Atacama.

En el caso de Collahuasi, se trata de un proyecto que comenzará el próximo año y que busca el desarrollo de infraestructura y una mejora en su capacidad productiva, “que contempla una inversión de más de US$ 3.200 millones”, destaca Richard Araya, gerente general de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami). Esto, explica Araya, pretende asegurar la continuidad operacional de la mina por unos 20 años adicionales. Además, destaca el proyecto Nueva Centinela de Antofagasta Minerals, el cual “contempla una inversión de US$ 4.400 millones” y que podría generar alrededor de 13 mil empleos durante su peak de construcción, “siendo un fuerte estímulo para la Región de Antofagasta”.

En ese sentido, Manuel Viera, presidente de la Cámara Minera de Chile, señala que en Antofagasta “se suman alrededor de 14 grandes proyectos y grandes operaciones que van a dinamizar la economía de esa región”. Pese a esto, Viera apunta que “están al debe con la exploración geológica” ante la falta de una política pública en este ámbito.

En la Región de Atacama, Viera destaca el desarrollo de la mediana minería, “que tiene mucho que ver con el impacto de Lundin, Caserones y Minera Carola, que pasa de mediana minería a gran minería”, dice, advirtiendo que este territorio “está bastante descuidado” en términos de fomento y desarrollo minero.

Innovación y empleo

Durante la asamblea anual de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), representantes del gremio destacaron los nuevos proyectos de inversión y crecimiento de Escondida I BHP y el Proyecto Observatorio de Rayos Gamma de Campo Amplio del Sur, que se edificará desde el 2026 en el Parque Astronómico Atacama como parte de las iniciativas que esperan marquen el futuro del desarrollo de la segunda y tercera regiones.

“Estos proyectos no solo aumentarán la empleabilidad en las regiones mencionadas, también promoverán avances tecnológicos y un significativo desarrollo en innovación”, afirma Marko Razmilic, presidente de la AIA, quien cree que la cartera de proyectos de Escondida representará un salto en innovación y requerirá de mano de obra calificada.

Así, el aporte de los proyectos tanto estructurales como de continuidad “será invaluable en términos de creación y proyección futura de puestos de trabajo, educación, desarrollo de pymes, carreteras e infraestructura local, entre otros elementos”, apunta Gustavo Sánchez, gerente senior de proyecto de Aurys Consulting.

Integrar a las comunidades

Para Razmilic, el principal desafío que enfrentan estos proyectos es asegurar un relacionamiento positivo y constructivo con las comunidades locales. La AIA busca abordar este reto al posicionarse como un agente que facilita y concreta espacios de reunión entre la gran y pequeña industria, así como entre los diversos actores de la sociedad civil.

No obstante, las brechas que persisten en la industria para impulsar con más fuerza el desarrollo de estos territorios “tienen relación con la construcción de confianza y un diálogo genuino que permita a las comunidades sentirse parte de las decisiones que involucran a su entorno”, explica Francisca Contreras, gerente de servicios de cambio climático y sostenibilidad de EY.

La ejecutiva añade que la gestión de expectativas también es esencial para “construir relaciones de confianza y colaboración entre las empresas mineras y las comunidades”, a lo que se suman desafíos de gestión ambiental y generación de beneficios económicos locales.

“Cuando los proyectos mineros revisan el impacto que existe hoy (…), suele revisarse el impacto en el corto plazo de las comunidades inmediatamente vecinas o que interactúan con los terrenos cercanos a la operación, pero muchas veces se obvia el impacto en el largo plazo que tienen con respecto a temáticas de desarrollo económico y de salud”, concluye Agustín Ariztía, gerente de proyecto de Aurys Consulting.